En este caso, Argentina deposita pesos en China a cambio de aceptar yuanes en el banco central.
De esta forma, es una forma de ampliar las reservas de divisas del banco central y aumentar su monto total.
Ahora, las empresas que importen bienes podrán pagarlos en yuanes sin poner en riesgo las reservas de dólares que posee el BCRA, y se beneficiarán de una mayor agilidad en la adquisición de divisas.
La idea de cancelar los intercambios comerciales con empresas de este país ya la planteó el presidente del BCRA, Miguel Ángel Pesco, el año pasado, quien señaló en entrevista con Télam que se «está trabajando».
«China está interesada en que el yuan se convierta en una moneda global. Ya se ha incluido en la canasta de Derechos Especiales de Giro (SDR) del FMI, y la idea es que los exportadores chinos valoren los contratos en yuanes y puedan pagarse a través de un canje».explicó en ese momento.
La permanencia del yuan en el banco central sin su uso para pagar importaciones de dólares, deuda o intervenciones en el mercado cambiario -es decir, permanecer como reservas brutas- es gratuita y permite fortalecer las cuentas sin gasto adicional. .
Dicho yuan también podrá ser utilizado -como lo será en este caso- para pagar importaciones chinas sin descontar dólares de sus reservas, a lo que Argentina estaba obligada porque actualmente tiene un déficit comercial con el país asiático.
“Swap” también presenta como otra opción el uso del yuan para su posterior conversión a dólares, permitiendo su uso para el pago de deuda, importaciones en moneda estadounidense o para intervenir en el mercado de divisas, permitiendo así su contabilización en tesorería. . BCRA como reservas netas o de libre disposición.
En este caso, el uso del «swap» supondrá una contracción del crédito con China.
Es decir, el yuan utilizado por Argentina debe ser devuelto por el banco central a su homólogo chino junto con el pago de una tasa de interés calculada sobre la base de la Tasa Interbancaria de Shanghái (Shibor), superior a las tasas de los organismos internacionales, pero inferior a lo que el país podría obtener hoy en el mercado.
En noviembre del año pasado, se «activó» el «swap» y se utilizaron 5.000 millones de dólares del acuerdo para reforzar las reservas de dólares sin restricciones del BCRA.
La presencia del yuan en el mundo
Aparte del aspecto cíclico de los «swaps»; El objetivo de China es aumentar la presencia del yuan en el mundo como depósito de valor: el año pasado el FMI aumentó el peso de esta moneda en el cálculo de los DEG del 10,92% al 12,28%, para pasar luego a formar parte del selecto club de las divisas que forman parte de la canasta en 2016.
A fines de marzo del año pasado, Brasil y China -el mayor socio comercial del país vecino- acordaron precisamente un mecanismo de compensación que les permita negociar en monedas locales sin tener que recurrir al dólar para las operaciones comerciales entre ambos países.
En el caso de China, el yuan superó por primera vez el mes pasado al dólar como la divisa más utilizada para sus transacciones transfronterizas, según datos oficiales difundidos por Bloomberg.
El uso de moneda local ha pasado de poco más del 0% en 2010 al 48% de las operaciones este año.