Electrum
Revista
Año Nº 45
Reportaje –
Democracia
La opinión pública viene siendo conmovido constantemente por una serie de sucesos, muchos de los cuales reúnen las condiciones de lo inaudito dentro de lo acontecer de un país políticamente organizado. La interpretación de tales eventos no resulta nada fácil, ya que la crudeza y simpleza de las medidas que se toman, en las esferas del gobierno, siempre contra los sectores populares, deja más margen para la ofuscación y la lucha que para opinar “teóricamente” sobre las mismas.
Por tal motivo el Secretario General del Sindicato de Luz y Fuerza de Córdoba, nuestro compañero Agustín J. Tosco fue entrevistado por un Cronista del Diario “Democracia” de la Capital Federal a los efectos de solicitarle su opinión sobre los problemas más agudos a que se ve sometido nuestro País.
Con el criterio de ofrecer la versión completa del Diario Democracia de su edición del día 8 de Julio del corriente año, transcribimos lo expresado textualmente por el mismo.
A. Tosco : Respetar la voluntad popular
CORDOBA, (De nuestra agencia). –Presentar a Agustín J. Tosco, secretario general del Sindicato Luz y Fuerza de Córdoba es, al mismo tiempo que fácil, difícil. Es lo primero porque Tosco es un dirigente de envergadura nacional de lúcidos méritos en su gremio y también en el movimiento obrero. Interpreta la lucha sindical como una etapa de un proceso a cumplir por las fuerzas del trabajo. Pero es asimismo difícil presentar a Tosco, en razón que nos extralimitaríamos de la objetividad que pretendemos guardar en virtud de la simpatía que le tenemos por su intenso bregar en bien de su clase. Queremos que sea el lector quien lo juzgue a través de sus respuestas.
Encontramos a Tosco, en su despacho sindical, en la calle San Jerónimo 374. Le pedimos su opinión sobre la prédica de DEMOCRACIA.
-Desde hacía tiempo que el pueblo trabajador no disponía de una tribuna periodística que reflejara, sin sectarismo ni discriminaciones, las inquietudes y aspiraciones de la masa obrera. En Córdoba se intensifica cada vez más el interés por leer DEMOCRACIA, que cumple una fundamental labor informativa y de esclarecimiento.
Satisfechos por la opinión, le preguntamos: ¿Qué piensa sobre la actual situación del país?
-La actual situación es caótica y no ofrece perspectivas de solución, si no se cambian los métodos y estructuras para encarar con profundidad una nueva política que esté consustanciada con el interés popular. Nuestra organización, en el orden nacional, por resolución de un congreso, ha planteado con claridad qué medidas deben adoptarse sin titubeos ni vacilaciones. Hay que desligarse del Fondo Monetario Internacional y de todo otro grupo financiero que condicione la planificación de nuestra economía y el rédito que le puedan brindar sus préstamos o inversiones. Se ha comprobado que este camino de supeditación foránea sólo conduce al coloniaje y al retroceso en el subdesarrollo. Entiendo que es preciso impulsar la actividad productiva y evitar la desocupación dando la debida participación a los sindicatos en la programación económica. No es posible que se excluya a quienes cumplen el rol fundamental de la riqueza nacional y que además no pueden disfrutarla ni intervenir en su distribución. El Estado debe regular el comercio interno y externo, promover la industria nacional y mantener relaciones económicas con todas las naciones del mundo de acuerdo con la mayor conveniencia para el país. Deben nacionalizarse totalmente los servicios públicos y las ramas fundamentales de la producción; anularse los contratos de petróleo; fortalecer a Agua y Energía Eléctrica y empresas provinciales que trabajan en coordinación con la misma y eleven el nivel de vida del pueblo. La brevedad del cuestionario impide concretar cifras y planes para corroborar estas afirmaciones, por lo que debo ceñirme a conceptos, que creo igualmente traducen con fidelidad el pensamiento de mis compañeros y el mío.
-¿Qué opina sobre el estado institucional del país?
-El 18 de marzo triunfó el pueblo en una sana manifestación democrática. Pero las fuerzas reaccionarias, mediante un golpe de mano, quebraron la precaria legalidad e impusieron un gobierno de ipso, que reedita planes de hambre y miseria. La absurda anulación del pronunciamiento popular ha desenmascarado a los pregones de la democracia, la república y la Constitución, que sólo usan esos sanos principios para engañar al pueblo. Los trabajadores, a quienes se nos quiere prohibir toda consideración sobre los asuntos más importantes del país, que hacen a nuestra propia existencia y futuro, rechazamos el apoliticismo anodino y cómplice a que se nos quiere llevar. Este apoliticismo significa la aceptación del orden de cosas existente; significa conformismo ante el sistema de vida que padecemos; expresa conformidad con el liberalismo que nos crea todo estos problemas económicos y sociales. De hecho, la organización sindical no debe tener una política partidista, sino cobijar sin discriminaciones a todos los afiliados y defenderlos en sus derechos. Pero para cumplir ampliamente este cometido, debe enrolarse en una gran política nacional y pronunciarse sobre los problemas, no sólo de contrato de trabajo, sino también de la más profunda gravitación.
-¿Qué posición deben adoptar los gremios?
-La unidad, la organización y la lucha. Estos son los principales elementos que deben promoverse en el seno del movimiento obrero para cumplir con las aspiraciones de todo el pueblo. Trabajar y luchar por un programa concreto, con todos aquellos que quieran apoyarlo, para liberar a nuestro país de los monopolios internacionales, impulsar su desarrollo y brindar a la clase trabajadora un nivel de vida acorde con la civilización en que vivimos.