24 de Noviembre de 1973

CHACO 

V CONGRESO DEL FRENTE ANTIIMPERIALISTA

Y POR EL SOCIALISMO 

Compañeros, compañeras: En primer lugar, quiero decir que junto con los compañeros cordobeses que venimos a este V Encuentro del Frente Antiimperialista y por el Socialismo, sentimos en la ruta de más de mil kilómetros una profunda emoción. Lo esencial, decía el comandante Ernesto “Che” Guevara, lo esencial es la voluntad, el compromiso para la liberación. Y nosotros en esos ómnibus en que venían los compañeros sacando el puño por las ventanillas, que venían desde Trelew, desde Buenos Aires, desde Salta, veíamos ese valor esencial del ser humano revolucionario que es el compromiso para la liberación nacional y social de nuestra patria. Lo decimos esto no a título de discurso, sino como hermanos proletarios, como hermanos de clase que al ver esa juventud levantando las banderas del Che, levantando las banderas de la Revolución latinoamericana, justificada está nuestra vida, justificado está nuestro compromiso, satisfechos estamos de haber vivido una etapa en que aflora la juventud, levantando las grandes consignas, jugando su vida en distintas oportunidades y comprometiéndose para siempre con esa gran causa social, con esa gran causa revolucionaria, con esa gran causa socialista.

Vivimos una época dramática en América Latina, vivimos una época difícil en nuestra patria, en esta reunión se ha convocado la formación de un Frente Antifascista, y tiene su profunda razón de ser que se convoque a la formación de un Frente Antifascistas, porque existen tendencias fascistas concretas en el denominado gobierno popular.

El fascismo es también esencialmente contrarrevolucionario y el fascismo no es un acto de espontaneidad sino producto de un proceso histórico, y el fascismo es el dique, el freno, que quieren imponer las clases dominantes y el imperialismo al avance revolucionario de los pueblos. Dentro de la dialéctica de la historia y como decía el gran Lenin: “Al avance del proceso revolucionario se intensifica el proceso contrarrevolucionario”. ¿Y cuáles son las características del fascismo? Son aquellas que están golpeando a nuestros compañeros, que están golpeando a nuestros sindicatos, que están golpeando al movimiento villero, que están golpeando al movimiento estudiantil. Nosotros sentimos en carne propia el ametrallamiento, sentimos la colocación de bombas, sentimos la sanción de los burócratas traidores, sentimos el aparato burgués, que protege toda esta represión cuando debería investigar y mandar a la cárcel o ajusticiar a esta barra de .fascistas que está agrediendo a nuestro pueblo.

El fascismo en un país de capitalismo dependiente, es la garra del imperialismo que se demuestra de distintas maneras. Nosotros no podemos aislar por ejemplo, una cosa que nos atañe fundamentalmente a los obreros: el Proyecto de Ley de Asociaciones Profesionales, que es toda una política. Porque hay una política al servicio del régimen económico proimperialista que quiere hacer des cargar sobre las espaldas de los trabajadores, sobre su propio derecho a la subsistencia, la crisis inexorable del sistema. ¿Por qué ellos aprueban una Ley de Prescindibilidad? Porque para Navidad y Año Nuevo va a haber muchos trabajadores cesantes, como ya algunos gobiernos de provincias han señalado que el 31 de diciembre, los compañeros contratados, semicontratados y transitorios, van a quedar cesantes. Porque el déficit del presupuesto burgués se resuelve siempre a costillas de menguar el escaso salario de los trabajadores. Nunca a costillas de las ganancias de las grandes empresas ni de los monopolios imperialistas. Nosotros hemos señalado que la Ley de Asociaciones Profesionales, es un, instrumento para reforzar el aparato burocrático, el aparato de todos esos sirvientes de la patronal, de todos estos que han firmado un Pacto Social a espaldas de los trabajadores, de todos estos que no protestan por la Ley de Radicación de Capitales Extranjeros, que en un principio mereció la condena unánime por la intromisión de Mr. Kreebs, el encargado de negocios yanqui y luego para deshonra de muchos compañeros que tienen una trayectoria de lucha en el movimiento peronista hicieron la ley que Mr. Kreebs quería y satisfacieron con esto la apetencia de este propio imperialismo que se había entro metido y había sido repudiado por la propia legislatura nacional.

El fascismo como bien se ha dicho usa de esa represión solapada, usa del engaño, y ahí tenemos a los viejos burócratas escribiendo solicitadas donde dicen que padecieron dieciocho años de cárcel y de persecución. Los burócratas tuvieron dieciocho años de componendas y de acomodos con el gobierno de turno. Esos burócratas que hoy se rasgan las vestiduras son enemigos de cuidado; pero nosotros nos sentimos militantes proletarios consecuentes, con toda la humildad de un proletario hemos ido anteayer al propio Congreso de la Nación y les hemos dicho: “Uds. son legisladores burócratas que con este proyecto de ley están traicionando a la democracia obrera. Hemos señalado allí que pueden hacer todas las leyes tramposas que quieran, que nos pueden intervenir nuevamente, que nos pueden quitar los edificios, que nos pueden suspender las personerías; pero revalidando una frase del Manifiesto del l de Mayo de 1968 señalamos una vez más que es preferible ‘honra sin sindicatos que sindicatos sin honra’ “, y le hemos señalado que con ley o sin ley las huelgas obreras se van a hacer. Porque los burócratas podrán tener mucho peso con la patronal, con el Ministerio de Trabajo, donde está uno de los grandes burócratas el Ministro Otero, pero no le van a poder aplicar ninguna ley a los valientes mineros de la Mina El Aguilar, a los compañeros de General Motors, porque nuestro espíritu revolucionario, el espíritu revolucionario de la clase obrera y de los sectores populares no será encasillado en una ley. Muchas leyes se han dictado en la historia para proteger a las clases dominantes y todas las clases dominantes han ido cayendo, hoy le toca al capitalismo para ser reemplazado por la sociedad socialista.

Perón, en una actitud muy ambigua, en la clásica actitud pendular que tenía fuera del país, ha dicho que cuando se critica a algún compañero de la burocracia se lo critica a él. Pues bien, si él toma esa crítica nosotros no renunciamos a ello y marcamos la diferencia total. Nosotros respetamos el pronunciamiento popular de siete millones y medio de argentinos, lo respetamos porque ese pronunciamiento popular quería cambios, no quería un Pacto Social que no fue votado, no fue votada i Ley de Prescindibilidad. Nosotros, y apelando a lo que decía una vieja compañera de lucha, como es la compañera Alicia Eguren, nos sentimos hermanos de clase, hermanos de sangre, de los compañeros peronistas revolucionarios, pero de estos peronistas que como Jaime, ya no ocultan la verdad sino que la señalan. La derecha o sea la tendencia fascista, tiene copado los principales ministerios, y por eso salen estas leyes, y nosotros debemos unimos con el peronismo revolucionario para rescatar el valor histórico de clase que tiene el movimiento peronista. Por eso compañeros tenemos tareas concretas todos nosotros para enfrentar, de ahí el valor de aglutinamiento de todas las fuerzas, que como decía el padre Ramondetti, hay que saber dividir bien el campo de los explotados del campo de los explotadores y buscar esa fraternidad que no significa renunciar a la identidad de cada organización, pero significa aceptar algunos desacuerdos por el gran trabajo común que hay que hacer por el objetivo revolucionario y liberador que todos nos planteamos juntos. Ese peligro fascista que existe y se ha materializado ya en distintas circunstancias. Por eso hay que propugnar el desarrollo de la conciencia de clase, de la conciencia popular, de la conciencia democrática y de la conciencia socialista que es lo único que nos va a permitir enfrentar al fascismo. Y en el campo denominado de la legalidad, los sindicatos deben fortalecer la autodefensa de masas contra las bandas de fascistas. Es una tarea fundamental el fortalecer el frente de todas las organizaciones populares y revolucionarias. Es una tarea prioritaria desarrollar el Frente Antifascista y es una tarea cotidiana el defender nuestros derechos como trabajadores, como ciudadanos y como hombres dignos. Por eso, para terminar, compañeros y compañeras, nuestra militancia proletaria está identificada con todas las tareas revolucionarias, con todos los compañeros que trabajan, que luchan, que combaten por redimir a nuestra patria de la penetración imperialista. Y hemos tenido hoy gestos humanos hermosos, como son todos los gestos de todos los revolucionarios. Compañeros, compañeras estudiantes de Buenos Aires que han venido y que han aplaudido con frenesí, digamos así, a compañeros aborígenes que apenas podían hablar nuestro propio idioma en nuestra propia tierra. Esto indica que hay una gran sensibilidad, como decía el Che: “El hombre siempre debe estar dotado de una gran ternura, de una gran ternura revolucionaria que es la que le hace amar profunda mente a sus hermanos, que es la que le hace odiar tenazmente a sus enemigos y a sus explotadores”. Para poder alzar insigne la presencia latinoamericana del Che, nosotros como trabajadores ante ustedes y entre nosotros, todos los días continuaremos llevando adelante ese compromiso para construir la nueva y hermosa sociedad: la sociedad socialista en la patria socialista y liberada...

AGUSTIN TOSCO