21 de Mayo de 1971 

Tosco – Ongaro

Villa Devoto 

1º) –José Rucci y sus acompañantes le observaron al Dr. Mor Roig que las detenciones de Agustín Tosco y Raymundo Ongaro eran producto de una especie de maniobra destinada a deteriorar la CGT o crear factores irritativos para dividir al movimiento obrero.

Ante ello decimos: Es indigno y vergonzoso caer en tan bajas expresiones cuando se pretende ir a reclamar la libertad de los presos. Más allá de divergencias, por apasionadas que pudieran ser, ningún argentino decente ignora la continua persecución y cárcel que nosotros hemos soportado durante esta “Revolución Argentina” con gobiernos elegidos por nadie, compartiéndola junto a millares de trabajadores, estudiantes y militantes populares.

Únicamente quienes recitan con palabras objetivos que traicionan con los hechos, pueden lanzar esas novelescas aseveraciones, que en el fondo desnuda su colaboracionismo, sus interminables engaños, su comercialización de los más puros sentimientos e ideales del pueblo, su vida de oligarcas, su absoluto divorcio de los verdaderos intereses de los trabajadores y de nuestra patria.

Parece increíble, pero estos denominados dirigentes sindicales, utilizan el mismo revanchismo, tortuosos medios de los sectores más reaccionarios, justificando en la práctica la persecución con que permanentemente los compañeros son golpeados por el régimen.

Si esa delegación, encabezada por José Rucci, recordara nada más que los allanamientos diurnos y nocturnos, coaccionando a mujeres y criaturas, las intimidaciones que no respetan ni a los familiares, la cárcel de ayer y hoy con todas sus consecuencias tendrían, siquiera por un resto de vergüenza, que responsabilizar de frente y públicamente al Dr. Mor Roig y al General Lanusse por todos estos atropellos y encarcelamientos. Y ya que tienen vocación para enredarse en el mal llamado juego limpio de un gobierno donde las promesas pasan y los hechos no se cumplen, deberían por los menos dejar de seguir buscando causantes anónimos entre quienes, con un todo perteneciente al  régimen, exhiben idénticas culpas. 

2º) –José Rucci está totalmente equivocado sobre las razones que tiene el régimen para nuestra detención y la de los demás presos gremiales, estudiantiles y políticos. No nos persiguen y encarcelan para promocionar a nadie. Porque si así fuera lo mandarían preso al mismo José Rucci que todos saben, es el primer destinatario de la promoción oficial en el cuerpo sindical.

A nosotros nos persiguen y encarcelan para doblegarnos, para hacernos callar. Porque nosotros no decimos que es “positivo” el aumento de salarios. Decimos que ese aumento que la inmensa mayoría no ha cobrado todavía y vaya a saber cuanto tardará en cobrar ya ha sido devorado en gran parte por la carestía de la vida cuyo crecimiento sigue sin cesar y que nos dejará peor que antes en el poder adquisitivo de las remuneraciones.

A nosotros nos persiguen y encarcelan para doblegarnos, para hacernos callar. Porque ambos partiendo de un concepto de la unidad de acción, de la unidad en la lucha, no nos prestamos mansamente a la elaboración de una comedia institucional o a cualquiera de sus alternativas golpistas, donde siempre el pueblo está ausente y al que se ha pretendido manipular en su conciencia, de una forma con Onganía, de otra con Levingston y de una tercera con Lanusse y Mor Roig. Todas al servicio de la reacción y del imperialismo y ninguna para la clase trabajadora y los sectores populares que quieren un cambio profundo y de contenido revolucionario de toda la estructura dependiente de nuestro país.

Es por eso, a grandes rasgos, que nosotros estamos entre las rejas de Villa Devoto mientras José Rucci y sus acompañantes visitan asiduamente la Casa Rosada. 

3º) –Se dijo también que la amnistía o disposiciones para la libertad de presos serán dadas a conocer para el 25 de Mayo. Esa fecha gloriosa para la liberación del país, cuya consumación total aún no se ha logrado y por la cual continuamos luchando denodadamente, está siendo aprovechada por anticipado para promover el éxito de esa entente híbrida de quienes usurpan la representación de los trabajadores con quienes usurpan el poder en Argentina.

Nosotros no sabemos en definitiva que pasará sobre el particular en este juego de simulación y oportunismo. Lo que sí sabemos y lo repetimos una vez más, es que sólo la esforzada acción y la lucha de las clases populares serán, cuando sea, la determinante concreta de la libertad de los presos gremiales, estudiantiles y políticos por encima de las formalidades que Rucci y Mor Roig quieran aparecer.