17 de Marzo de 1972 

CARTA DEL COMPAÑERO AGUSTÍN TOSCO 17 de marzo de 1972 

 

NUEVA CLAUDICACIÓN DE LA DIRECCIÓN PARTICIPACIONISTA DE LA CGT CENTRAL 

1. - Hace un tiempo se señaló en una carta desde la prisión, que el paro de 48 horas decretado por la conducción participacionista de la CGT Central encabezada por José Rucci, sólo perseguía inflar los globos de una supuesta combatividad. Se advirtió también sobre la desnaturalización de uno de los principales medios reivindicativos de la clase trabajadora, consumado por jerarcas y burócratas, al imponer la pasividad, el inmovilismo y el bloqueo a toda exteriorización dinámica de protesta sindical popular.

2. - La respuesta que viene dando y que expresamente ratificó en estos días el régimen gobernante consiste en:

a)      El próximo gobierno será de “transición y consolidación”, o sea el continuismo mal disimulado con la institucionalización del denominado Gran Acuerdo Nacional al que se pretende subordinar la voluntad soberana del pueblo;

b)      La ratificación de la política económica de explotación, dependencia y recesión, confirmando en el equipo oficial a sus principales mentores y ejecutores, todos inspirados en la línea de Adalbert Krieger Vasena;

c)      El rechazo a todas las demandas laborales y proyectos de “ley” para la creación de un Consejo Económico y Social sin facultades para solucionar ningún problema;

3. - A momento que tener que recaudarse las deliberaciones del Comité Central Confederal de la CGT para decidir la continuación del Plan de Lucha, con el que hicieron permanente alharaca Rucci, Coria y sus adláteres, el movimiento obrero argentino se encuentra con que la reunión es postergada una y otra vez, y nadie puede saber ya cuando efectivamente se realizará.

Ante esta vergonzosa claudicación cabe preguntarse:

¿Es que fueron resueltos algunos de los problemas, por los que millones de trabajadores paralizaron sus actividades durante 48 horas?

¿Es que se otorgó un aumento sustancial de salarios que permitiera recuperar el poder adquisitivo perdido por la tremenda carestía de la vida?

¿Es que fueron convocadas las tan reclamadas comisiones y paritarias para discutir los convenios colectivos de trabajo?

¿Es que fue levantado el estado de sitio, derogada la legislación represiva, la pena de muerte y dispuesta la libertad de los presos políticos, gremiales y estudiantiles?

¿Es que se reunieron las asambleas, los cuerpos de delegados, los congresos o cualesquiera de los organismos de consulta y decisión de los trabajadores para resolver sobre el particular?

Nada de eso a sucedido. Nada ha sido resuelto y ni siquiera prometido para aliviar la penosa situación de las masas laboriosas argentinas.

Rucci, Coria y demás jerarcas burócratas, por sí y ante sí en sesiones secretas, pretenden continuar manipulando ignominiosamente al movimiento obrero y servirse de él para todo tipo de componendas sobre la base de reiteradas claudicaciones.

Para evitar supuestos golpes, contragolpes o autogolpes, Rucci, Coria y demás participacionistas han manejado las cosas de tal manera que, en definitiva los únicos golpeados en sus justas aspiraciones resulta ser la clase trabajadora y demás sectores populares, mientras la reacción y la oligarquía continúa disfrutando de su omnímodo poder e irritantes privilegios.

4. - Ante esta nueva aberrante defección de la conducción de la CGT Central, los sectores que mantienen sus principios y posiciones de lucha deben intensificar sus esfuerzos y acciones para defender los derechos de la clase trabajadora y a su vez desplazar a estos jerarcas del sindicalismo amarillo enquistado en la Central Obrera.

Ya la Regional Córdoba de la CGT y otras regionales, los gremios peronistas combativos, la CGT de los Argentinos, el Movimiento Nacional Intersindical y otras agrupaciones sindicales combativas, se pronunciaron por un urgente, organizado y efectivo plan de lucha.

Es necesario la inmediata reunión del Comité Central Confederal y el cumplimiento de paros, actos y movilizaciones para enfrentar la reaccionaria política del régimen, su sustituto, el golpismo y la consumación del fraude implícito en el Gran Acuerdo Nacional.

No hay otra forma de defender con autenticidad los derechos económicos, políticos y sociales de la clase trabajadora y del pueblo. 

Cárcel de Villa Devoto

Agustín Tosco

17 marzo 1972